Hoy vamos a preparar una receta, que aunque es tradicional de la gastronomía vasca, por su valor nutritivo deberíamos tener presente en el menú familiar habitual




- El bacalao se desala (en la nevera) en una fuente con agua (aproximadamente 48h antes de preparar este plato).
- Las cebollas se pelan, se lavan y se pican en “brunoise”
- Los pimientos choriceros se lavan y se meten en una olla con un poco de agua para que se ablanden. A continuación, se quitan las pepitas y el rabo y con la ayuda de una cuchara se separa la carne de la piel. La carne se pica y se reserva. La piel se desecha.
- En una cazuela, se cubre el fondo con aceite de oliva y se sofríe la cebolla hasta que adquiera un color doradito
- A continuación se pelan los ajos, se pican y se doran junto con la cebolla
- Se incorpora la rebanada de pan –desmigada–
- Cuando se haya dorado el pan, se añaden los pimientos morrones cortados en tiras y la carne de los pimientos choriceros
- Se rehogan y se mezclan todas las verduras
- Finalmente, se incorpora la salsa de tomate –tomate natural triturado–
- Se añade un poquito de agua, hasta cubrir las verduras y se deja cocer durante 30-40 minutos (aproximadamente)baca
- Si se considera necesario, se rectifica de sal
- Cuando la salsa esté reducida se puede triturar para que quede más “fina” – es mejor utilizar el chino que la batidora
- Para terminar, sobre la salsa caliente, se incorpora el bacalao y se deja cocer durante 10 -15 minutos (aproximadamente), según el grosor de las rodajas de bacalao
- Se disponer en fuentes de servir
- Y… ¡¡a comer sano!!
