NutriLeón - Orejas de Carnaval

Orejas de Carnaval.

Seguramente que  entre disfraces y alegría os habréis dejado endulzar por las maravillosas  “orejas de carnaval”, así las conocemos en León, en otras provincias se las conoce por hojuelas.

El Carnaval, a pesar de ser una fiesta pagana, se relaciona y se une a la Religión, algo que me ha llamado la atención. Después del martes de Carnaval, comienza La Cuaresma, que para los cristianos representa un tiempo de ayuno y reflexión previo al Domingo de Pascua. Antiguamente, este periodo era sumamente respetado y eran los días previos (correspondientes con los días de Carnaval) cuando se permitían fiestas amenizadas con excesos culinarios, que reflejaban el estilo de vida de nuestros antepasados. En estas fiestas, destacaban postres de recetas sencillas: buñuelos, torrijas, orejas de carnaval o flores, cuyos moldes pasaban de madres a hijas. Todos ellos tienen en común que son postres para freír en sartén, ya que hace 60 años las casas no disponían de  hornos. De esta forma, el Carnaval era la última oportunidad para llenar “la barriga” y disfrutar de la fiesta antes de iniciar el camino de recogimiento hacia la Semana Santa.

Por si alguien se anima, os dejo la receta de las Orejas de Carnaval, que son facilísimas de hacer, y además, la masa también puede servirnos para hacer unas magníficas empanadillas, eso sí, sin azúcar glas 😉

  • 250g de harina
  • 50g de mantequilla
  • 25g de anís o aguardiente de Valdevimbre
  • 100ml de agua tibia
  • 60g de azúcar glas
  • 1 huevo
  • Ralladura de medio limón
  • Una pizca de sal

El primer paso es mezclar todos los ingredientes excepto, la harina y el azúcar glas, para formar una masa homogénea. Poco a poco, incorporamos la harina hasta formar una masa manejable y elástica. Esta masa hay que amasarla hasta obtener una masa espesa que pueda ser estirada con el rodillo.

Una vez amasada la masa, se forma una bola y se deja reposar durante 30-60 minutos. Transcurrido ese tiempo, se estira la pasta con el rodillo hasta dejarla muy fina y se corta en forma de Oreja.

En una sartén amplia con aceite  hirviendo se fríen las Orejas por ambos lados y se escurre el aceite sobre un papel absorbente. Finalmente, antes de servir, sobre las orejas espolvoreamos el azúcar glas.

¿Sabéis el resultado final?…finas, crujientes y deliciosas

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